Muchos niños actualmente viven en aislamiento, ya que las circunstancias excepcionales de la crisis sanitaria producida por la propagación del coronavirus, los han obligado a estar en casa sin poder salir a escuelas, parques u otros espacios de esparcimiento donde puedan socializar.
Con la pandemia, se está perdiendo la oportunidad de que los niños conozcan, se relacionen, formen camaradería o incluso creen una complicidad entre sus iguales, lo que puede afectar su desarrollo psicosocial. Además, la falta de juego al aire libre, la dificultad de realizar ejercicio físico e incluso no tener el recreo escolar, puede aumentar la irritabilidad del niño y el estrés que puede llegar a afectar a su estado emocional.
Se estima que uno de cada cuatro niños sufre ansiedad por el aislamiento social derivado del coronavirus, y que muchos de ellos corren el riesgo de sufrir trastornos psicológicos permanentes, incluida la depresión.
Gracias a los medios como Internet, televisión y radio se pudo iniciar el nuevo ciclo escolar; sin embargo, el regreso a clases presenciales es inevitable, y cada vez se vislumbra más esa posibilidad. Por lo que, las autoridades de salud pública y la Secretaría de Educación Pública (SEP) implementarán protocolos como el uso del cubrebocas obligatorio, el constante lavado de manos, e integrarán clases acerca del cuidado de la salud, alimentación e higiene.
Pero ¿Qué pasa con la salud emocional? Todo lo anterior no es suficiente, también las instituciones escolares deben adoptar soluciones para fortalecer la empatía de los alumnos con la naturaleza y salud psicosocial.
El voluntariado, es una opción para fortalecer los vínculos amistosos, trabajar la inteligencia emocional, aumentar la sensibilización y empatía con su entorno y sus iguales y asimismo fomenta la autonomía y responsabilidad. Por ello, Earthgonmic México A.C. invita a escuelas y padres de familia a realizar actividades altruistas que garanticen su estabilidad emocional, como: germinar un árbol, adoptar un mascota en situación de abandono o crear centros de acopio para esas mismas mascotas o también hacer reforestación, entre muchas actividades más que el programa de Restauración Ecológica y Táctica Operativas R.E.T.O. organiza.
Si se quiere asegurar para cualquier niño o niña, la integración de equipo, team building, habilidades blandas, vivir una experiencia inolvidable en compañía de sus mejores amigos, y reducir el impacto psicosocial que ha dejado este pandemia es necesario fortalecer los lazos que se han perdido, y que mejor manera de hacerlo, que salvando el planeta al dejar una huella verde en él.
Toda información sobre las actividades que ofrece el programa de voluntariado, presencial y digital, se encuentran en la página de elreto.mx.Asimismo, puedes mandar correo a contacto@earthgonomic.com y dejar tu propio legado.